miércoles, 22 de noviembre de 2017

INDEPENDIENTES: CRÓNICA DE UNA DERROTA ANUNCIADA

Todo candidato independiente tiene derecho a querer ser, pero Yo no
les apuesto nada porque no me gusta perder y es que, para empezar, ya
no discutamos si los señores candidatos (y la candidata para que no se
enoje el viejal) van a poder o no lograr las firmas que requieren;
también hay que tomar en cuenta que una buena campaña se hace con tres
cosas que a ninguno de los independientes en los tres niveles le he
visto: 1. Buenas propuestas. 2. Pacas de billetes y 3. Una buena
estructura que les ayude a cuidar el voto el día de las elecciones.
¡No hay de otra! Incluso los candidatos podrían brincarse lo de las
buenas propuestas porque hoy en día, cualquier barrabasada dicha en
público es tomada como tal; pero no tienen dinero para ofrecerle al
mexicano pedinche, ni tampoco tienen una estructura que les permita
cuidar el voto.

Como sea, los independientes deben tener siempre los pies en la tierra
y creo que no es así. La vida virtual, llámese Facebook, Twitter,
Instagram o cualquier red social, es un juego y para nada refleja la
verdad; el candidato que por tener miles de seguidores en las redes
diga que la tiene ganada, está realmente frito y desconoce el juego de
la política. No niego que las redes, si se sabe usarlas, sean de mucho
provecho para quienes quieren contender; pero la vida virtual no es la
vida real y lo que reina en las redes es la simulación. Por si fuera
poco, el candidato independiente debe adoctrinar a su gente y hacer
seguidores, no fanáticos. El seguidor le ayudará siempre a ver la
realidad y a pensar en nuevas propuestas; el fanático se dedica a
pelear con todos en las redes, tal como lo hicieran los adeptos del
doctor Paco Sánchez en las pasadas elecciones.

Además, y cito como antecedente el 2015, desde ahorita les digo que
cualquier candidato independiente que nos venga con el cuento de que
"los partidos son el diablo y hay que quitarlos", firmará su derrota
que de por sí ya tiene ganada. La corrupción, amables lectores, está
en el pueblo, no en los partidos. Sé que hay quienes no comparten esta
opinión conmigo; pero los partidos se conforman de mexicanos. Si los
partidos que se conforman de mexicanos son los corruptos, entonces
claro está que el pueblo es el corrupto, ya sea que enarbole la
bandera de un partido político o se suba al carro de los
independientes. O como decía mi abuelita: "Es la misma gata, nomás que
revolcada".

Señores candidatos independientes; admiro y respeto la aspiración de
cada uno de ustedes, pero a nivel municipal y estatal la competencia
está entre el PRI y MOVIMIENTO CIUDADANO; mientras que en la nacional,
entre el PRI y MORENA. No hay más. Felicidades por su valentía, y
suerte para la próxima. Contacto: 044 322 191 10 89.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

LA PLAGA DE LOS RELIGIOSOS

Además de ser un fugitivo del CONAPRED por discriminar al joterío,
también lo soy de las religiones; todas me persiguen y todas me
ofrecen una salvación que, dicho sea de paso, nunca les pedí. Tengo
una consciencia todo terreno de lo que el mundo considera "bueno" y
"malo" y por mi propio gusto (y mi propio derecho) elegí el supuesto
infierno de la iglesia; sin embargo, y no obstante que los "dioses" ya
lo entendieron, los fanáticos de unas y de otras sectas no y cuando no
llegan los castigos de Jehová los domingos por la mañana, son los
cristianos los que me envían sus versículos bíblicos que dizque "para
que reflexione" o los católicos que ya se sacaron un nuevo retiro y
vienen a invitarme, sin acordarse de que a mí los únicos retiros que
me gustan son los bancarios. ¿Cómo explicarles que no quiero nada con
su dios?

El pasado domingo estaba Yo esperando un mensaje importante mientras
redactaba un documento que iba a necesitar al siguiente día; no
contestaba mensajes, excepto si se trataba de la persona con la que Yo
estaba por cerrar un negocio. De pronto, el celular comenzó a sonar
con mensajes y dije: "¡Ya la hice!" Pero al checar, resulta que era
una cristiana enviándome versículos bíblicos que dizque "para que
reflexionara y me convirtiera a Cristo". Enojado, le escribí como
respuesta: "¡Yo soy del diablo! Así que no vuelvas a escribirme nada
de eso". Todo volvió a la normalidad porque al cristiano, aunque se
diga muy valiente y cubierto con la sangre de Cristo, si le menciona
usted al diablo va y se esconde cagado de miedo. Pues bien, todo iba a
la perfección hasta que un rato después, sonó de nuevo el celular;
esta vez se trataba de un católico que enviaba una imagen de no sé qué
santo, con una petición de oración en cadena que, si no mandaba a diez
personas, según esto ya estaba Yo frito por el resto de mi existencia.
Le solté unas cuántas majaderías (en el nombre de Cristo para no
pecar) y seguí escribiendo. ¡Qué manera de joder y quitar el tiempo!

En otra ocasión, que por cierto también era domingo por la mañana y
Yo, allá en el vigésimo primer sueño después de haber ido a un
convivio, me encontraba tirado en la cama. De pronto, escuché a lo
lejos unos toquidos en mi puerta y desperté. Pensé que era la PGR,
porque así tocaban y además, con esto de que le pego a medio mundo no
sería raro. Pero no. "¡Ahí van hombre!" Grité mientras me vestía y me
daba una peinada. Abrí la ventanilla de la puerta y… "Buenos días". Me
dijo la voz de una mujer joven al parecer. "¿Estaba dormido?" A lo que
Yo respondí todavía con mi aliento a moneda oxidada: "Tengo la maldita
costumbre de hacerlo por las noches y, cuando es domingo, hasta muy
entrada la mañana. ¿Qué se le ofrecía?" Y entonces vino aquella frase
que me hizo enojar. "Somos testigos de Jehová y estamos aquí para
traerle buenas noticias". Recordaba que, la última vez que decidí
seguirles la corriente, la buena noticia era que el mundo se iba a
acabar. Así que le dije a la señorita que no tenía tiempo para
escucharle.

Señores religiosos, tengan la creencia que quieran pero no vengan a
joder al prójimo. No les he pedido ninguna salvación para mi alma;
tampoco he solicitado la amistad de Dios como para que vengan a
ofrecérmela; si se trata de joder, vayan a joder a su mamá, por no
decírselos en mexicano puro. Contacto: 044 322 191 10 89.

jueves, 9 de noviembre de 2017

¡VAYAN AL CARAJO CIEN VECES!

La actitud demagoga y paternalista de nuestros políticos está formando
una generación de idiotas irresponsables. Nos hemos convertido, léame
usted bien, en "el país de todos los derechos" y esto lo digo con
burla y sarcasmo. Le explico:

Hoy en día, aunque solo en lo que le conviene, el Gobierno quiere ser
"padre" y "salvador" de la nación; así que toma acciones dizque para
cuidarnos, olvidándose, o tal vez haciéndose tarugos para que el
pueblo no lo reconozca, que muchos de nuestros males son causa de
nuestra propia irresponsabilidad. Suben el precio de la coca, la
cerveza y el cigarro, pensando que ya por eso el mexicano no los va a
comprar y así, papá Gobierno está evitando la obesidad, el alcoholismo
y el cáncer. Luego el pueblo sigue comprando estas cosas y la
Secretaría de Salud tiene que inventarse un programa más para poder
dar atención a los gordotes, los cirrosos y los que se andan muriendo
de cáncer. ¿Pero por qué gastar el presupuesto de este modo? El que
toma coca, come tacos y tortas y le entra al pan como Yo, sabe que va
a engordar; el que fuma sabe que esto le puede causar cáncer; el que
toma sabe que le puede venir una cirrosis. No entiendo por qué, si uno
se lo busca, el Gobierno tiene que inventarse un gasto del que no es
responsable. ¿Me capta la idea?

Lo mismo pasa con las melolengas adolescentes; y con los retardados
jovencitos de secundaria; se les habla hasta el cansancio sobre
métodos anticonceptivos, se les regalan los condones (cosa que pienso
que no está bien porque a cada quién le deben costar sus aventuras) y
se les informa de una manera que antes no se veía en ninguna parte;
sin embargo, no bien quedan panzonas las niñas, el Gobierno les ofrece
una ayuda para que acaben sus estudios. ¿Y por qué? ¿Acaso el país
tiene la culpa de su irresponsabilidad como para que los impuestos se
destinen a pagar su ineptitud? ¡Pues por supuesto que no! Pero dígales
algo y verá cómo el Instituto de la Vieja, y las huevonas y fodongas
feministas lo tachan de "machista". Conmigo ya lo han hecho pero la
misma se sacan, porque cuando digo algo ya sé lo que viene después y
la verdad, la opinión de las feministas es para mí como excremento en
el suelo.

En resumen, nos estamos convirtiendo en un país en el que, si a alguno
se le jode la mano con la que cuando va al baño se limpia el agujero,
este exige que el Gobierno venga a limpiárselo. ¿Quién tiene la culpa?
Estos demagogos y su estúpida forma de pensar en la que "todos tenemos
derechos y todos estos derechos son fundamentales por ser derechos
humanos". ¡Y todo por ganar el voto! ¡Vayan al carajo cien veces!
Contacto: 044 322 191 10 89

lunes, 6 de noviembre de 2017

¿QUÉ ME CORRESPONDE CUANDO ME DESPIDEN DEL TRABAJO?

A veces me toca saber de casos donde un trabajador que es despedido de
forma injustificada, se conforma con una miserable bicoca cuando,
sacando cuentas de acuerdo a la ley y no a los criterios de los
serviles contadores de la empresa, le correspondería muchísimo más;
por eso hoy quiero hablar de las prestaciones que a usted, amable
lector, le corresponden en caso de que un día no muy lejano lo
despidan sin justificación alguna. Y bueno, aprovechando el viaje
también le recuerdo que si ya anda en estos problemas puede llamarme y
con gusto lo atiendo. Ahora pasemos al tema:

En primer lugar, si lo despiden de forma injustificada y usted ya no
desea ser reinstalado, puede y debe recibir tres meses de salario como
Indemnización Constitucional; además de eso, si ya tenía más de un año
y no le dieron vacaciones, se las tienen que pagar y son seis días de
salario aumentados con el veinticinco porciento, según la Ley Federal
Del Trabajo. Si todavía no cumplía el año, deben pagarle una parte
proporcional de las vacaciones. Ya nada más con eso, se superan con
mucho los miserables dos mil pesos que normalmente ofrece el patrón
como si de tirarle un mendrugo de pan a un pordiosero se tratara, pero
espéreme que todavía no acabo con las cuentas.

Además de lo que ya dije, si aún no tiene el año trabajando para la
empresa que lo despide también deben pagarle la parte proporcional del
Aguinaldo, y si ya cumplió el año, o si nunca se lo pagaron a pesar de
todos los años que trabajó, debe pedirlo en la demanda; son quince
días por año. Si trabajó oras extra también hay que exigirlas, y si
nunca le dieron descansos también. Eso sin contar con las utilidades
de la empresa, de las cuáles también le corresponde algo si es que no
se lo dieron. Como puede ver, es un buen dinero que al trabajador
despedido no le cae nada mal; solo que hay un pequeño detalle: Hay que
primero ganar la demanda.

Muchas veces, el trabajador se deja llevar por un pensamiento que
acaba perjudicándolo; ese pensamiento es: "Si contrato abogado me va a
cobrar, y voy a perder en eso parte de lo que me den". Yo cobro el
treinta porciento de lo que usted gana. Supongamos que le pagan cien
mil; Yo me quedo con treinta mil y a usted le quedan libres setenta
mil. ¡No le vienen mal! ¿O sí? Digo, si los compara con los dos o tres
mil que el patrón quiere darle, la verdad sí es un abismo de
diferencia. Por eso, hoy usted que lee este comentario mío, que tiene
la impotencia de haber sido maltratado y corrido, que tiene la
necesidad de mantener un hogar y también desea que las cosas no se
queden como están, es necesario que tome la decisión y llame al 044
322 191 10 89 para darle una cita, y la primer consulta totalmente
gratis para hablar de su asunto sin compromiso. También puede hacerlo
si su asunto es familiar, mercantil, o de cualquier otra rama del
derecho. ¿Qué espera?