ADIÓS CHANCLA MÁGICA; BIENVENIDA GENERACIÓN DE MARICONES

A penas el 14 de Agosto del año pasado publicaba Yo una columna titulada "¿DÓNDE QUEDÓ EL RIGOR?" En la que hablaba sobre cómo ahora los irrespetuosos hijos de hoy quieren hacer lo que se les da la regalada gana, manipulando y desafiando a sus padres; y viene a colación ahora porque el 31 de Julio, amable lector, se aprobó en Sinaloa una modificación a la Constitución del Estado en la que se prohíbe todo tipo de castigos corporales a los niños, que fue conocida en los medios como la "Ley Chancla". Pero… ¿Y qué tan bueno será eso? Vamos analizando el asunto:

Aún siendo un niño ciego, cuando cometía alguna tropelía mi madre agarraba la chancla y me recetaba dos o tres chanclazos con los que, así como por arte de magia, terminaba con mis berrinches; en nuestros días ya no le puede uno levantar la voz a los chiquillos porque ya lo están amenazando a uno con llamarle a los inútiles y buenos para nada del Sistema DIF. No les toque un pelo si quiera, porque ya dicen que son víctimas de "maltrato físico", y los psicólogos haciéndoles segunda con tal de que se diga que su profesión vale para algo. Ahora bien; es cierto que la niñez tiene derechos y eso es innegable; son un sector vulnerable al que, como sociedad, debemos proteger de cualquier abuso y no nos hagamos; porque hay padres que, ya sea porque así los trataron a ellos de niños y ahora quieren desquitarse, o porque en realidad saben una jodida sobre la paternidad, imponen castigos muy severos a sus hijos golpeándolos como si estos fueran bestias de carga y eso no está bien. También es cierto que, como padres, hemos de privilegiar el diálogo y la disciplina, evitando en la medida de lo posible los golpes; sin embargo, decir que los chanclazos no hacen falta como aseguran los psicólogos e intelectuales, es la más grandísima estupidez que he escuchado y que nos quieren imponer para contribuir a la continuidad de esta generación de idiotas. Ya sé que son muy duras mis palabras al referirme a los niños y jóvenes de hoy; pero es que no les puedo llamar de otra manera y si no me cree, le recomiendo que vea el video que anda circulando por las redes, en el que uno de esos idiotas adolescentes de hoy decidió lanzarse desde un puente nomás porque la madre le quitó el celular. Un niño bonito que seguramente nunca fue disciplinado y cuando la madre por fin quiso hacerlo, el mariquita decidió quitarse la vida porque "no podía soportarlo". Valiente generación de jotos hijos de mami estamos criando nomás por miedo a pegarles cuando se debe.

Ahora bien, lo voy a decir aunque haya quien se enoje; total, si no les gusta lo que digo no me lean y asunto arreglado. Ahí les va: A los tarados psicólogos se les hace fácil aconsejar que se dialogue con los niños; pero eso no siempre es posible. Por su corta edad física, mental y emocional (y esto no creo tener que explicárselo a los "profesionales" de la materia), el niño no sabe hacerlo y Yo no puedo, ni quiero, dialogar con alguien que como respuesta lo único que sabe hacer es tirarse al suelo y berrear como si lo estuvieran despellejando. ¿O no es eso lo que normalmente hace un niño cuando no entiende razones? No digo que sea anormal en ellos; lo que digo es que debido a que los niños no tienen capacidad para saber mucho de lo que les es provechoso, ni su intelecto da para entender muchas cosas; a veces hay que ejercer la autoridad que tenemos como padres y si no nos entienden, acomodarles una buena reatera por su propio bien aunque luego tengamos que torear a los lelos del DIF. Al cabo "pal santo que es y los milagros que hace"…

En resumen, la "Ley Chancla", que por lo pronto nomás la tienen los sinaloenses, viene a darle en la torre a nuestros niños y a nuestra patria que de por sí ya está bien jodida con esto de que ahora todos tienen derechos y nadie tiene obligaciones. Ojalá a nuestros diputados melolengos no se les ocurra implementarla aquí en Jalisco.

Facebook: https://m.facebook.com/omar.arcenolasco

Twitter: @elbastonazo

Teléfono y WhatsApp: 322 191 10 89.