¿Qué será lo que quieren las feministas cuando se manifiestan en favor del aborto? La pregunta, amable lector, puede sonar muy tonta; pero a medida que lea mi comentario sabrá que tiene mucha lógica. De hecho, y aunque muchas mujeres se me enojen, los argumentos que presenta el viejal para exigir la legalización del aborto pueden ser fácilmente derribados y voy a demostrárselos. Aclaro que no tengo motivos religiosos para escribir lo que viene, y mucho menos me mueve una falsa moral como la que manejan las mayorías; Es, simplemente, que los argumentos feministas no tienen sentido. ¿Vamos con el primero para que vea?
1. Las feministas argumentan que deben tener derecho a abortar cuando así se les dé la gana porque muchos niños nacen de una violación, cuestión en la que estoy totalmente de acuerdo. Nadie puede, ni debe ser obligado a traer al mundo un producto engendrado por un violador; solo que estas bestias rumiantes, que nomás sirven para abrir las piernas y para protestar cuando se les alteran las hormonas, no leen, y por tanto no saben que desde hace mucho el Código Penal Federal, el de Jalisco y los de los demás estados, ya establecen que "No es punible el aborto causado sólo por imprudencia de la mujer embarazada, o cuando el embarazo sea resultado de una violación". Es decir, que el aborto ya les está permitido en cualquiera de esos dos supuestos y, por tanto, ya no hay que pedirlo. También está permitido cuando la mujer embarazada tenga peligro de muerte, por si pensaban alegarlo. Nomás es cosa de checar los códigos y listo. No obstante, en las marchas, cuando estas mujeres son entrevistadas e incluso en sus "gritos (berridos) de guerra", no deja de escucharse este tonto argumento que, como Usted ya ha leído y puede comprobar, Por eliminación queda fuera. ¿Seguimos?
2. Otro de los argumentos del viejal desquehacerado, perdón, de las feministas, es que muchas mujeres viven con hombres machistas y golpeadores a los que Ellas, tan sufridas, no pueden decirles que no a la hora de tener sexo sin protección porque entonces las golpean. Como resultado de esto, quedan embarazadas sin desearlo. Pues bien, aquí Yo les preguntaría una cosa: ¿O sea que no tienen valor para dejar a su macho golpeador, pero sí lo tienen para asesinar a una, dos, tres o más criaturas que vengan como resultado de esas relaciones forzadas? ¿Pues no que muy güevudas? Es ahí donde deben demostrar su dizque poder; pero prefieren seguir soportando a un machista de los que tanto critican y por los que tanto protestan, y son capaces incluso de abortar antes de dejarlo. Eso sí, no las inviten a una manifestación porque ahí sí se deschongan, gritan, patalean y dañan el patrimonio de la nación. Luego llegan a la casa a servir dócilmente a su "violador". ¿Continuamos?
3. Además de estos dos argumentos sin sentido, las feministas también alegan que muchas mujeres quedan embarazadas accidentalmente, por lo que los niños son no deseados. Al respecto hay que decir que, habiendo pastillas, condones, aparatos y todo tipo de protecciones anticonceptivas, ese ya no es argumento ni para las preparatorianas calentorras. En otros tiempos, cuando la iglesia tenía más dominados a Gobierno y sociedad, ese habría sido el argumento ideal; pero ahora no, porque la información está en todas partes y hasta los niños de sexto año saben ya cómo se hacen los chamacos.
4. Aplica la misma para quienes defienden el aborto arguyendo que hay madres que no tienen con qué dar de comer a sus hijos. Si esas madres son tan pobres, la solución es muy sencilla: ¡No tengan hijos y ya! ¿Tan difícil es entenderlo? Pero conociendo su situación se ponen a parir como conejas. ¿De quién es la culpa entonces? Nonos hagamos; es de ellas y nada más.
Conclusión: Señoras feministas, analizando lo antes dicho, podemos cerrar con que sus argumentos se oyen muy bonitos y conmovedores en los medios, pero nomás para el que no piensa; la gran verdad es que los bebés no piden venir al mundo; vienen por irresponsabilidad de ustedes y todavía quieren matarlos. Van a disculparme que les hable tan duro, pero de ese tamaño es también su incongruencia. Los caballeritos lindos, los faldillones, los afeminados y los políticos en campaña no se atreven a decirlo; pero ya saben que Yo soy medio machista y medio patán, así que ahí tienen. ¿Qué alegato les queda? Espero sus comentarios, pero con argumentos sólidos y no con reacciones hormonales.
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