lunes, 3 de noviembre de 2014

ATENCIÓN INGENIERO MANUEL GONZÁLEZ FARRERA

Voy a contarles esto, porque tal vez haya gente a la que también le esté pasando. Con tanta jalada, robo y descuido por parte de TELMEX, TELECABLE se convirtió para la gente en una opción muy buena en cuanto a telefonía. Lo malo es que, como ya criaron fama, se están echando a dormir y eso no le conviene al GERENTE, quien muy seguido leo que publica los beneficios de esta empresa en el mismo diario para el que colaboro. ¿Por qué lo digo? Nomás lea:

 

Resulta ser que de un tiempo a la fecha, el servicio de telefonía, y a veces hasta el de internet, falla mucho y lo curioso es que incluso, estuve checando y hasta parece tener sus días fijos para morirse. El colmo de todo, fue cuando esta semana de plano mi teléfono se murió por casi siete días. He reportado; pero cuando lo hago vía telefónica, tan pronto detectan de qué colonia llamo, una máquina me responde que hay una falla en mi colonia y que por eso no tengo el servicio. Y mire usted lo que son las cosas, porque Yo creo que si estoy llamando para reportar, es obvio que hay una falla y que no necesito que me lo digan. ¡Menos una máquina! Lo que sí necesito, es que se me diga cuándo me la van a arreglar, y sobre todo, que resuelvan ese asuntito de una vez por todas porque, como les cuento, pareciera que ya en TELECABLE tienen días para desconectarlo a uno.

 

No me quejo del trato que se me da cuando comparezco en persona para reportar; pero pues esto de que se me muera el teléfono a cada rato, implica tener qué ir a cada rato a las oficinas de la empresa, y para que todavía me salgan con que el técnico pasará a revisar en un lapso de entre 24 y 48 horas, pues ahí se me va de nuevo la semana. De plano esta última vez si me pasaron a perjudicar mucho, así que Yo hago un serio y muy atento llamado al INGENIERO MANUEL GONZÁLEZ FARRERA, GERENTE de TELECABLE en PUERTO VALLARTA, para ver si me hace el favor de decirle a su personal que no la chifle, y de darle una estiradita de orejas a quien tenga qué dársela. Yo defendía este servicio por bueno; pero ahora con estas fallas ya no sé. Ahí les encargo.

 

Posdata: Ya tengo teléfono otra vez. Pero… ¿Hasta cuándo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario