Esto de que al hombre le peguen suele creerse solo como parte de alguna de las tarugadas a las que la gente suele llamar “telenovelas” en TELEVISA. Sin embargo, sucede con muchos hombres en la vida real. Como mexicanos, teniendo como contexto la cultura de que el sexo fuerte es el masculino, resulta verdaderamente increíble concebir el hecho de que un hombre sea maltratado por su mujer. Normalmente, y eso cuando se atreven a denunciarlo, los casos más sonados y más conocidos son los de las mujeres. Pero, aunque nos parezca así de imposible, resulta que también hay hombres en la misma situación. Fue lo que me dijo, entre otras cosas, la licenciada ISABEL RUELAS, coordinadora de la UNIDAD DE ATENCIÓN A VÍCTIMAS DE LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR, del SISTEMA DIF MUNICIPAL.
Pero antes que nada, quiero decir que cuando escuchamos la palabra DIF, pensamos en discapacitados, despensas, personas de la tercera edad… Pero no pensamos en que también hay unidades de atención como la que vamos a ver. La UAVI, (UNIDAD DE ATENCIÓN A VÍCTIMAS DE LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR) es el organismo encargado de dar la atención debida a las víctimas de la violencia en casa. Debo decirle amable lector que, es tanta la mala fama que algunos malos y llorones (jotos) funcionarios me han hecho, que la licenciada se turbó un poco al saber quién era Yo. Pero luego, cuando le dije a lo que iba, se relajó. Y así inicié:
“Voy a preguntar esto tal cuál como lo escucho allá afuera entre la gente: Hombres maltratados. ¿Mariconada o problema real?”
A lo que ELLA respondió:
“Un problema real que, desgraciadamente, por la costumbre como tú lo dices o por los prejuicios que traemos de que el hombre no se debe quejar, el hombre no llora, a veces los hombres no denuncian por estas mismas costumbres que traemos arraigadas. Si vas a las instituciones como al ministerio público por ejemplo, para presentar una denuncia porque mi mujer me agrede, Pues se burlan de Él y por no sufrir las burlas mejor se abstienen de hacerlo”.
Según nos cuenta, hay varios tipos de violencia. Está por ejemplo, la violencia física, la psicológica, la económica y, como para no creerlo, la violencia sexual. Esto último llamó mucho mi atención: “¿Hombres violados?” Nos comenta la licenciada que, estos casos, los de violencia sexual, se dan en un uno porciento. Pero sí existen. Así lo explica ELLA:
“Cuando tú no quieres tener relaciones sexuales y tu esposa sí, cuando te fuerza a hacerlo, entonces hablamos de violencia sexual o de violación”.
La licenciada añade que: “Denunciar si un hombre es violentado es un derecho que nadie debe avergonzarse de ejercer”. Nos invita a acudir a la UAVI, donde se nos proporcionará (o bueno a los mandilones) la debida asesoría.
En mi opinión, muy personal por cierto, un hombre maltratado por su mujer es un pobre infeliz arrastrado y sin dignidad. Digo, al pan pan y al vino vino, así que las cosas como son. Pero de que los hay los hay y, este organismo, se dedica a brindarles la atención. ¿Cómo la ve?
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