lunes, 5 de noviembre de 2012

¡JAURÍA DE PERROS!

A los del MOVIMIENTO CIUDADANO, unos días en el poder les bastaron para olvidarse de su misión "celestial redentora" en favor de los pobres, y se volvieron perros rapaces contra el pueblo que ingenuamente los puso. ¿Quiere saber por qué?

 

DESGARRIATES DE GALLEGOS

 

Con voz temblorosa como siempre, el famoso tamalero que fue regidor, que ahora es Jefe de PARTICIPACIÓN CIUDADANA y que a pesar de tres años como regidor sigue siendo experto en decir burrada y media, HÉCTOR GALLEGOS DE SANTIAGO, compareció a dar explicaciones a gente del sector 8, quienes se impusieron y le gritaron que las cosas no se estaban haciendo bien. Elecciones amañadas, con irregularidades y autoritarias, son las que se han estado llevando a cabo en las colonias, cosa que en sus tiempos cuando cobraba como regidor, HÉCTOR GALLEGOS criticaba tanto de otras administraciones. Afortunadamente, la ciudadanía ya no se traga esos cuentos chinos, y después de escuchar las pobres y tartamudas defensas del tamalero (quien por cierto alegaba que el personal no estaba todavía capacitado), lo obligaron a decir, casi sin ganas, que suspendía las convocatorias. Y dígame si no sigue siendo tonto este señor, cuando para justificar sus trinquetes alega que su personal no está capacitado, después de todo el tiempo que tuvieron para capacitarlo. O sea: "Disculpen ustedes, pero es que a pesar de que tuvimos mucho tiempo, no nos dedicamos a ver cuál era el perfil de nuestra gente (si es que tienen alguno) y la pusimos al ahí se va". ¿Usted lo justificaría? Yo no.

 

¿Y EL DESCUENTO AL SUELDO APÁ?

 

Otra cosa que prometieron, y de lo que tanto se jactaba la gente mochilista, era de esta promesa de que al llegar al poder, el alcalde se bajaría el sueldo un veinte porciento, y que lo mismo haría con regidores y directores. Han pasado ya dos sesiones, y tanto el mochilas, como sus más fieles seguidores y que tanto dicen defender a los pobres (incluyendo aquí a SANTA SUSANA DE LOS DESPROTEGIDOS), nomás agarran su dinerito y se lo meten a la bolsa bien calladitos. Dos sesiones amables lectores, y en ninguna de ellas ha figurado en el orden del día este asunto tan esperado por quienes aún creen en los reyes magos. Agarren una silla y esperen.

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